Encuentra aquí lo último en Semana
El discurso de Gustavo Petro en la plaza de Bolívar ha sido interpretado como la hoja de ruta para los dos años de gobierno que le restan. Algunos sectores creen que será más radical y dividirá al país para naufragar en aguas turbulentas, escenario en el que se mueve bastante bien. El problema es que quedó demostrado que sus palabras están generando un enfrentamiento entre ciudadanos. Petro se equivocó al calificar la marcha de sus opositores del 21 de abril como la de “la muerte”. La apuesta de Petro de radicalizar a la sociedad puede ser peligrosa y más aún cuando desconoce a un sector del país que se movilizó en su contra. Vendrán tiempos difíciles.